Los principios de la Declaración de 1789

AutorBernardino Esparza Martínez
Páginas47-49

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LOS PRINCIPOS de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789, inspirada en la Declaración de Independencia de Estados Unidos de 1776, ha sido uno de los documentos trascendentales para instaurar y respetar los derechos humanos. Es un documento fundamental de la Revolución francesa de 1789, pues logra concretar los derechos humanos, es decir, los colectivos y personales con carácter universal. En virtud de ello, los principios consagrados en dicha Declaración son los que se establecieron, principalmente en el artículo 2, como derechos.

Art. 2. La inalidad de toda asociación política es la conservación de los derechos naturales e imprescriptibles del hombre. Tales derechos son la libertad, la propiedad, la seguridad y la resistencia a la opresión.

La libertad

Del mismo modo, el artículo 1º de la Declaración destaca que los hombres nacen y permanecen libres e iguales en cuanto a sus derechos. Y agrega que las distinciones civiles sólo podrán fundarse en la utilidad pública. Su artículo 4º establece que la libertad consiste en poder hacer todo aquello que no cause perjuicio a los demás. El ejercicio de los derechos naturales de cada hombre no tiene otros límites que los que garantizan a los demás miembros de la sociedad el disfrute de esos mismos derechos. Estos límites sólo pueden ser determinados por la Ley.

La propiedad

El artículo 17 destaca respecto a la propiedad que, siendo inviolable y sagrado el derecho de propiedad, nadie deberá ser privado de él,

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excepto en los casos de necesidad pública evidente, legalmente comprobada, y en condiciones de una indemnización previa y justa.

La seguridad

Los artículos del 5 al 16 de la Declaración refieren el principio de lo que constituye la seguridad:

El artículo 5 determina que la Ley sólo tiene derecho a prohibir las acciones perjudiciales a la sociedad. Lo que no está prohibido por la Ley no puede ser impedido. Nadie puede ser obligado a aquello que la Ley no ordena.

El artículo 6 menciona que la Ley es expresión de la voluntad general. Todos los ciudadanos tienen derecho a colaborar en su formación, sea personalmente, sea por medio de sus representantes. Debe ser igual para todos, sea para proteger o para castigar. Siendo todos los ciudadanos iguales ante ella, todos son igualmente elegibles para todos los honores, colocaciones y empleos públicos, conforme a...

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