Ponen mujeres manos a la obra

AutorArmando Estrop

Un grupo de mujeres puso manos a la obra y rompió esquemas para construir lo que será un centro de oración de la Colonia Hacienda de Guadalupe, en el municipio de Guadalupe.

Desde hace aproximadamente dos meses, manos femeninas se encargan de apisonar la tierra, transportar material en carretilla y pintar las rejas de la construcción ubicada en el cruce de la Avenida Jardines de la Silla y Palma Brasil.

Todas estas damas voluntarias que se autodenominan "albañilas" pertenecen a la secta de Testigos de Jehová y trabajan toda la jornada para ver construido lo que será un salón de estudios para todos los que siguen esta doctrina.

De buen humor, el grupo de amigas y compañeras de trabajo coincidió en que aunque se considera un trabajo para hombres lo que están haciendo, ahora se sienten más seguras al saber que pueden llevarlos a cabo sin problemas.

En ocasiones, sobre todo el fin de semana, el grupo rebasa las 20 mujeres que, con casco y herramientas, están dándole forma a un proyecto colectivo que surgió como idea desde los primeros días del 2002 y que ahora se va cristalizando con la barda perimetral y los preparativos para los cimientos.

Flora Saucedo de Huerta es una de las pocas compañeras casadas, o al menos la única que no le apena decirlo sin sonrojarse.

"A mí me tocó andar con carretilla, anotando el material que hay y lo que me pongan hacer. De albañila se...

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