La perspectiva de género correlacionada con el enfoque centrado en la persona, una propuesta para eliminar la violencia hacia las mujeres

AutorLinda Castro Gaínza
Páginas99-117
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La perspectiva de género correlacionada
con el enfoque centrado en la persona,
una propuesta para eliminar la violencia
hacia las mujeres
Cynthia Hernández Sánchez
Linda Castro Gaínza
Ángel Armando Martínez Covarrubias
El fenómeno de la violencia es un tema que merece ser estudiado con un enfoque
inter y transdisciplinario. El presente ensayo tiene como objetivo el explicar cómo
ha sido abordada la violencia como un problema a resolver desde las políticas públi-
cas a nivel internacional y nacional, así como el establecer lo que debemos entender
como el enfoque centrado en la persona.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), a partir del año 1993, aprobó la
Declaración sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer entendiendo que
ésta consiste en:
Todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pue-
da tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la
* Licenciada en Psicología y Maestra en Desarrollo Humano por la Universidad Veracruzana.
Psicóloga Clínica en Secretaría de Salud donde brinda atención a mujeres víctimas de violencia.
Consejera Consultiva del Instituto Veracruzano de las Mujeres. Fundadora de Estudios y Atención
Psicológica Araucaria AC. Dirección de correo electrónico: cynhes@hotmail.com
** Doctora en Defensa y Seguridad Nacional, Secretaria General de la Universidad de Ciencias
de la Seguridad de Nuevo León, Profesora Investigadora de la Universidad Autónoma de Nuevo
León. Investigadora Nacional SNI. lindacastrog@yahoo.com
*** Doctor en Administración Pública, Asesor y Consultor Senior en Planeación Estratégica, en-
focado en Inteligencia y Seguridad.
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mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de
la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada. Com-
prende, la violencia física, sexual y psicológica, producida por miembros de la
familia, por la comunidad en general o por el Estado (cit. por SESVER, 2005: 4).
El Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva (CNEGySR)
reere que en la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar
la Violencia Contra la Mujer: “Convención de Belém do Pará”, se determinó que la
violencia contra la mujer es “cualquier acción o conducta, basada en su género, que
cause muerte, daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico a la mujer, tanto en el
ámbito público como en el privado” (Organización de Estados Americanos [OEA],
1994). La violencia puede ser física, sexual, económica, por abandono, patrimonial
o institucional, sin embargo la violencia psicológica es la que se da en mayor medida
y también está presente en todas las formas de violencia (CNEGySR, 2006).
La Norma Ocial Mexicana -046 – SSA2 – 2005 reconoce al maltrato psi-
cológico como “la acción u omisión que provoca, en quien lo recibe, alteraciones
psicológicas o trastornos psiquiátricos” (SS, 2009: 7). Algunos ejemplos de abuso
psicológico son: menospreciar o humillar frente a otras personas, gritar, insultar,
ofender, celar, ejercer control, aislar de la familia y amigos, amenazar o dañar a per-
sonas o cosas queridas, maltratar o dar muerte a los animales domésticos, amenazas
de golpes o muerte y amenazar con quitar a los hijos y las hijas.
Dentro de la población vulnerable a ser víctima de violencia se encuentran las
mujeres en mayor porcentaje; es así que la violencia contra las mujeres, de acuerdo
con el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), ha pasado de ser considerada
como un problema “privado” a entenderla como un problema de salud pública ante
el cual nadie puede permanecer indiferente (INSP, 2004: 34).
La violencia de género suele ejercerse en distintos ámbitos: en lo doméstico,
generalmente por parte del hombre; en lo laboral, mediante acoso sexual; por discri-
minación en las tareas, los sueldos o los ascensos; en los medios de comunicación: la
publicidad, el humor gráco y televisivo, los estereotipos desvalorizadores de géne-
ro, donde el cuerpo de la mujer o del hombre aparecen frecuentemente como objeto
sexual o señuelo de venta, como mercancía ofrecida para los ricos y poderosos; en
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