Una persecución con pocos resultados

AutorVíctor Fuentes

El 9 de marzo de 1998, Mariano Herrán Salvatti, entonces Fiscal antinarcóticos de la Procuraduría General de la República, hizo el anuncio oficial: estaba en curso un macroproceso contra el Cártel de Juárez, 65 presuntos miembros de la organización criminal habían sido acusados desde enero ante una Juez federal de la Ciudad de México.

Por su magnitud y alcance, era un juicio inédito para nuestro país, por mucho, el más importante en la historia de la lucha contra el narcotráfico, y creció aún más en septiembre de 1999, cuando la Juez Olga Sánchez Contreras acumuló a este proceso el que se había abierto en otro Juzgado contra 38 personas involucradas en las operaciones del cártel en Quintana Roo.

Tres años después, estos son, según información oficial, los resultados del proceso:

De los 101 acusados -los hermanos Víctor y José Luis Patiño aparecen en ambas consignaciones-, han sido detenidos 39 y 62 permanecen prófugos, entre ellos, los seis cabecillas del Cártel de Juárez por los que, el día del anuncio, Herrán Salvatti ofreció una recompensa de 4 millones de pesos por cabeza.

De los 39 detenidos, 17 han sido absueltos por falta de pruebas en su contra, uno fue absuelto, y ahora está prófugo porque se ordenó su reaprehensión, y únicamente tres han sido declarados culpables de los delitos que les imputó la Procuraduría General de la República.

Las averiguaciones fueron integradas por la Unidad Especializada en Delincuencia Organizada (UEDO), creada en 1997, que tuvo en este caso la primera gran prueba de fuego para nuevas atribuciones legales que incluyeron el uso de testigos protegidos y beneficiados, y la intervención de comunicaciones privadas.

Los absueltos

Exonerados: Cinco fueron exonerados de inmediato y sin ser sometidos a juicio, ya que la Juez Sánchez Contreras determinó que "del análisis de los elementos de la indagatoria, no se encontraron datos suficientes para relacionarlos con los actos delictivos cometidos por el llamado Cártel de Juárez".

Sergio Medina Cruz, teniente coronel de infantería, quien supuestamente recibió pagos de Ismael Zambada García, "El Mayo" Zambada, uno de los líderes del cártel.

Florentino Morato Cruz, mayor de infantería del Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales (GAFE), acusado en términos similares que Medina.

Ariel Hiram Hernández Pérez, segundo comandante del GAFE en Hermosillo, en igual situación que Morato.

Julio Sergio Santoyo López, soldado escribiente, supuesto escolta en Guadalajara de Eduardo...

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