Permisos de importación enfrentan a jugueteros

MÉXICO, D.F., marzo 24 (EL UNIVERSAL).- Sin un pleito legal de por medio ni una confrontación cara a cara, dos grandes en el mercado de juguetes en México se enfrentaron para ganar más participación en una industria cuyo valor alcanza 2 mil 300 millones de dólares anuales.

Ha sido una batalla de declaraciones, en la que Hasbro y Mattel se han acusado mutuamente de no permitir la competencia, de que no hay libre concurrencia y que una o la otra distorsiona el mercado. Naturalmente, las empresas pequeñas del ramo tomaron partido y, así, el juego dio inicio.

El punto de conflicto fue que los permisos para importar juguetes y artículos para bebés que otorga el gobierno federal dejaron fuera a quienes no cuentan con una fábrica en México, es decir, a Hasbro y a la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD), entre otras, pero sí benefició a productores como Fotorama, Prinsel, Impala y Mattel.

A pesar de que las empresas libraron una batalla de misivas ante la Comisión Federal de Mejora Regulatoria (Cofemer) —que evaluó las afectaciones que tendría el postergar el mecanismo—, este lunes la Secretaría de Economía determinó que el esquema que surgió en 2005 se utilizará hasta 2017, y estableció una fórmula de asignación de cupos de acuerdo con los niveles de fabricación de cada empresa.

Aun con las acusaciones de que se distorsiona el mercado y que no habrá libre concurrencia ni competencia, la Secretaría de Economía (SE) consideró que los permisos de importación, sin el pago de arancel, promueven la inversión, la innovación y la competitividad.

La SE considera que se eliminan las distorsiones en el mercado porque se puede asignar directamente tanto a grandes empresas, como a micro y pequeñas, siempre y cuando tengan plantas para producir juguetes, de acuerdo con las justificaciones que envió a la Cofemer.

En apoyo a la decisión, el director general de la Asociación Mexicana de la Industria del Juguete (Amiju), Miguel Ángel Martín, aseveró: “Necesitamos tener un terreno parejo. No queremos subsidios ni tasas especiales, queremos salir a competir en costos a nivel global, y con un esquema así, en cuatro o cinco años la industria mexicana del juguete será la más grande del mundo”.

Sin embargo, Hasbro, ANTAD y otras más advierten que no se promueve la competencia pareja porque el año pasado una sola firma importó 47% del monto total de los permisos que da anualmente el gobierno: Mattel

La misma Comisión Federal de...

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