Pemex: crisis y alternativas
| Autor | Francisco Garaicochea |
En política nacional y petrolera un plan nacional de energía debería incluir lo necesario para permitir a Pemex, en primer término, modificar su régimen fiscal y darle autonomía de gestión. En estos dos objetivos casi todos estamos de acuerdo, sin embargo, paradójicamente, poco se ha hecho al respecto.
Entre lo que necesita Pemex, destacan las siguientes medidas: incrementar la relación reservas probadas-producción para alcanzar y mantener niveles mayores de 20 años; reducir, hasta anular, la exportación de petróleo crudo, a fin de producir los refinados y petroquímicos necesarios para abastecer la demanda interna nacional y exportar excedentes; desarrollar todos los proyectos de explotación de recuperación mejorada y de campos maduros y marginales que se han diferido por su relativa baja rentabilidad; operar como una empresa pública orientada al beneficio social; pagar impuestos similares a los aplicados a las empresas estatales de otros países; operar con autonomía de gestión administrativa; regresar al modelo de organización de empresa integrada con precios de transferencia equivalentes a los costos de producción; actualizar el reglamento de trabajos petroleros; formar los recursos humanos necesarios para realizar eficazmente las actividades técnicas requeridas, y anular los Contratos de Servicios Múltiples.
No será tarea fácil reconstruir a Pemex de acuerdo con las propuestas anteriores, en caso de que fuesen aceptadas, puesto que durante más de 25 años se actuó en sentido contrario. Es importante establecer un programa en el que se definan etapas y fechas límites para alcanzar cada uno de los objetivos mencionados en el plan nacional energético aquí propuesto.
A continuación algunos comentarios aclaratorios a los temas propuestos.
Régimen fiscal
Pemex paga de impuestos más del 60 por ciento de sus ingresos brutos, lo que lo conduce al colapso y a postergar la inversión en proyectos de menor rentabilidad comparativa. Pemex recurre al endeudamiento interno y externo para realizar proyectos, como es el caso de los Pidiregas, y en ocasiones para poder cumplir con sus obligaciones fiscales.
Autonomía de gestión
Los procedimientos de trabajo técnico se han degradado por los diversos requerimientos y lineamientos administrativos, derivados de la Ley de Obra Pública y de iniciativas unilaterales de las subdirecciones de la subsidiaria correspondiente. Actualmente los profesionales dedican la mayor parte de su tiempo a actividades relacionadas...
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