Menos penas, más pan

AutorJimena Larrea

Dicen que las penas con pan son menos, pero en Harinas Elizondo hace seis meses el panorama en las oficinas era complicado para los empleados que tramitaban facturas, pues en cada transacción ingresaban los mismos datos de las personas físicas o morales, aun cuando fueran clientes de años atrás.

Pero ese no era el único problema que la empresa de harinas, sémolas y productos integrales enfrentaba, pues la cantidad de programas y herramientas de administración, compras y logística utilizados hacían el trabajo de dichas áreas más complicado.

Cada departamento usaba una herramienta informática distinta, por lo que no compartían datos entre ellos, aunque esto impactara negativamente en su productividad, eficiencia y satisfacción del cliente. Esto requería capturar los datos de ventas, compras y clientes en cada sistema.

Un día la dirección de operaciones de la fábrica escuchó las plegarias de sus empleados y analizó cuáles eran sus opciones tecnológicas. Durante cuatro meses un asesor analizó las necesidades de la compañía y recomendó integrar todo en un nuevo sistema que sustituyera sus antiguos programas administrativos en módulos de cobranza, finanzas y laboratorio.

Harinas Elizondo reemplazaría todos los programas por un sólo sistema de inteligencia de negocio al que migrarían la información contable, de los clientes y los proveedores para que las áreas involucradas tuvieran acceso a los mismos datos y los compartieran.

Ahora los empleados tendrían un nuevo reto. El sistema les requirió ser muy ordenados al...

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