Jorge Fernando Negrete P. / Canal 22: la utopía de la televisión
| Autor | Jorge Fernando Negrete P. |
Estábamos en la casa de José María Pérez Gay, director general de Canal 22 en marzo de 1994, celebrando el primer encuentro internacional de la televisión cultural México-Europa. Un año antes, el espléndido canal cultural ARTE había nacido y meses atrás el Canal 22 comenzó transmisiones. La delegación del canal ARTE la encabezaba su presidente, Jérôme Clément, el presidente de su consejo consultivo, Bernard-Henri Lévy, y una pléyade de teóricos de los medios públicos como Gert Opitz, Dietrich Schwarzkopf e increíbles realizadores como Reiner Moritz y Jean-Claude Carrière. El motivo y nombre del encuentro eran una provocación en sí mismo: La utopía de la televisión. Había nacido un gran proyecto cultural.
Años antes, la conspiración que daría origen al Canal 22 comenzó el 26 de enero de 1991, cuando se envía una petición de la Fundación Manuel Buendía integrada por 800 intelectuales a Carlos Salinas de Gortari, para que no se desincorporara la frecuencia del Canal 22 junto con el paquete de frecuencias de Imevisión.
El Dr. Pérez Gay me había nombrado subdirector General de Política Cultural del canal un año antes del lanzamiento. En esos años, 1993-1994, Europa comenzaba el proceso de apertura de la televisión privada, abandonando el modelo de monopolio público, pero el pudor y la preocupación sobre el destino del universo audiovisual provocaron un movimiento global que buscaba una televisión no sólo pública sino deliberadamente cultural.
Así nació ARTE en Europa, así nació Canal 22 en México. El día que llegué al canal recomendado por Fátima Fernández Christlieb, el Dr. Pérez Gay me entregó una enorme selección de catálogos de programación que, entre otros, había sido revisada por Raúl Trejo Delarbre, Fernando Solana y Martha Cantú.
Lo que no sabía era que la persona que mejor los conocía era el propio Pérez Gay. Muy pronto tuve el privilegio de viajar y negociar junto con él la adquisición de más de mil horas de programación cuidadosamente escogidas. Pocos saben que Pérez Gay era un voraz consumidor de audiovisuales y su obsesión literaria se reflejaba en la estricta selección de la programación.
Al lanzamiento del Canal 22 le incorporó un trabajo de curaduría exquisita, donde las biografías y series de escritores presentaban -encarnados y vitales- a las plumas que gravitaban en el imaginario cotidiano de Pérez Gay: Mishima, Genet, Celine, Camou, Cioran, Conrad, Dostoyevsky, Eliot, Ibsen, Joyce, Kafka, Mann, Pirandello, Proust, Onetti...
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