Inulina: polímero de fructosa con un gran futuro en nanotecnología

(Material transmitido por el Servicio Sindicado el pasado 28 de febrero)Rafael LópezCIUDAD DE MÉXICO, marzo 8 (EL UNIVERSAL).- Investigadores del Laboratorio de Polímeros Biocompatibles del Instituto de Biotecnología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), coordinados por Clarita Olvera Carranza, demostraron que el polímero de fructosa denominado inulina se estructura naturalmente en forma de nanopartículas. Esto abre las puertas para emplearlo en las industrias alimentaria, cosmética y farmacéutica.

El proceso biotecnológico completo para la síntesis de las nanopartículas de inulina lleva varios años en desarrollo. En 2003, un grupo de investigadores del Instituto de Biotecnología y de la Facultad de Química de la UNAM identificó una enzima (biocatalizador) generada por la bacteria Leuconostoc citreum CW28, que a partir de sacarosa (azúcar de mesa) produce inulina con un alto peso molecular.

Esta cepa de Leuconostoc citreum está presente en el pozol, bebida maya-chontal hecha con cacao y maíz. La doctora Carmen Wacher, de la Facultad de Química, fue la responsable de su aislamiento durante un amplio estudio de los microorganismos que se hallan en esa bebida prehispánica.Cadena de azúcares

La inulina es una cadena de azúcares (en este caso fructosa) unidos con un tipo de enlace llamado beta 2-1. Este polímero también se encuentra presente en diferentes plantas, como las de alcachofa, ajo, cebolla, agave y plátano; sin embargo, en ellas es de bajo peso molecular.

Las características y propiedades, tanto funcionales como químicas, de los polisacáridos dependen del tipo de enlace con que se unen los azúcares. El tipo de enlace que une a la fructosa en la inulina es muy particular: durante la digestión no puede ser roto, mientras que las bacterias benéficas del intestino (bifidobacterias y Lactobacillus) sí pueden degradarlo. Debido a esto, la inulina de bajo peso molecular se considera una fibra dietética soluble, un edulcorante y un prebiótico.

Un prebiótico es un alimento para las bacterias benéficas del intestino, no para el organismo humano, pues el sistema digestivo no lo puede hidrolizar.

"Cuando el prebiótico llega al intestino, las bacterias benéficas de éste lo consumen. Así, las bacterias perjudiciales disminuyen y la población del intestino cambia. Por eso, el consumo de la inulina como prebiótico en la vida diaria puede ayudar a mejorar la salud intestinal de los humanos", acota Olvera Carranza.

Otro polímero de...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR