Implicaciones de la vecindad con territorios cerrados. El Fraccionamiento El Cid y sus fraccionamientos y colonia vecinos en Mazatlán, Sinaloa

AutorLeticia Alvarado Fuentes
Páginas237-268
Implicaciones de la vecindad con territorios cerrados.
El Fraccionamiento El Cid y sus fraccionamientos
y colonia vecinos en Mazatlán, Sinaloa
Leticia Alvarado Fuentes
Introducción
La ciudad es el resultado de las múltiples intervenciones que las diferentes ca-
pacidades humanas le han impreso. En la elemental búsqueda de protección
a la vida y a los bienes es que los individuos hacen vida en común, compar-
tiendo esa necesidad de sobrevivencia y, desde luego, ese espacio, a la larga la ciu-
dad, que también les ha de ser común.
Otra necesidad elemental para la supervivencia es la posesión individual, fami-
liar y grupal del espacio que se comparte y es aquí en donde se empiezan a reconocer
las diferencias, tanto sociales como espaciales; al existir grupos familiares o grupos
de varias familias unidas por diferentes razones, se aborda el tema de la alteridad. Yo
soy, en tanto exista el otro, el diferente a mí, a nosotros. Yo, los míos, ocupamos y
nos hacemos de este espacio diferenciado.1
Para la apropiación espacial, el instinto habría de ser fundamental, ya que se bus-
 
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1 La noción de territorio implica ya una suerte de delimitación espacial en la que quienes los habi-
tan, disponen de reglas de convivencia que ordenan sus relaciones y su relación con el espacio que uti-
lizan y reconocen como propio. Espacio como jurisdicción es territorio.
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ARQUITECTURA SIN RIESGOS.VIVIENDA Y URBANISMO DE COMUNIDADES CERCADAS
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social no sólo de quienes forman mi grupo, sino de los otros, que convienen, respe-
tan o son sometidos a ocupar otra demarcación territorial.
Las colonias y los fraccionamientos en las ciudades son delimitaciones territo-
riales imaginarias determinadas por elementos materiales y visuales, tales como las
sendas (vialidades) y los bordes (límites naturales o construidos), retomando la clá-
La imagen de la Ciudad, de Lynch (2000). El in-
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barda perimetral hace evidente la demarcación de este espacio como no accesible
para todos quienes comparten el territorio de la ciudad, y los fraccionamiento y la
colonia —una diferencia más que será abordada en el curso de este trabajo— que
le rodean no es sólo por el interés en las implicaciones del espacio real, material, el
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real es apropiado, distribuido, diseñado o no urbanísticamente y cómo este espacio,
resultado de las relaciones de poder en la ciudad, es percibido y actuado por los di-
ferentes actores que viven en él. Importa para este estudio especialmente el espacio
intuitivo, a la manera de Hartmann (1986:127 y siguientes), es decir, el espacio in-
directo de la conciencia, el de las vivencias, la percepción, la imaginación, la expe-
riencia y el pensamiento.
Cómo condiciona la presencia de una barda perimetral el uso, apropiación, per-
cepción e imaginarios de los habitantes del fraccionamiento El Cid y de los habitan-
tes de los fraccionamientos y colonia vecinos respecto a la seguridad que implica
vivir dentro de una determinada área, será uno de los objetivos en este estudio que
abordará aspectos espaciales reales e intuitivos.
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nados con la antropología y sociología urbana directamente vinculados a la vecindad
y a la vida social que se lleva a cabo cuando se comparten espacios comunes, fueron
observadas las características socio espaciales y económicas de los fraccionamientos,
y realizadas entrevistas abiertas con dueños y propietarios de los fraccionamientos
aquí enunciados, cuyo número varió dependiendo del área que ocupan en la mancha
urbana. Así, doce entrevistas fueron aplicadas a adultos propietarios o residentes del
fraccionamiento El Cid; diez a propietarios o residentes de Lomas de Mazatlán; ocho
en el Toreo; ocho en el Sábalo Country Club; seis en la colonia Francisco Villa;2 y
cuatro en el fraccionamiento Rincón Colonial.
2 Si bien es cierto que el espacio que oc upa toda la colo nia Francisco Villa en l a ciudad de Ma-
zatlán es mayor inclusive que el fraccionamiento Lomas de Mazatlán, la decisión de realizar este núme-
ro de entrevistas aquí se debió a que solamente los habitantes del costado poniente de la Avenida La Marina
IMPLICACIONES DE LA VECINDAD CON TERRITORIOS CERRADOS
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El espacio diferenciado: el territorio de los fraccionamientos
y la colonia3
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nalmente al individuo, al grupo, a la colectividad que los usa, los explota, los disfru-
ta, que se mueve en sus interiores, recorriéndolos, dominándolos y limitándolos. Y
es así que la expresión de Signorelli de tener espacio-
rigir, de ser, de relacionarse y viceversa; precisamente en toda sociedad la privación
de espacio es la correlación de una posición subalterna o marginal en el sistema so-
cial” (2002: 53). Nosotros hemos incorporado aquí el concepto de territorio como
ese espacio diferenciado en el que las leyes de convivencia son aceptadas por quie-
nes allí habitan.
El suelo urbano, la parte del territorio de la ciudad que cada individuo, familia o
grupo social se puede apropiar, es entonces considerado como un recurso y su apro-
piación no es sólo la manera en que se satisface una necesidad para la supervivencia
y el desarrollo, sino la oportunidad de adquirir poder, dependiendo de la valoración
que de cada territorio apropiado se haga, ya por sus propias características físicas
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por la subjetividad que el conjunto social le otorga.
¿Qué implicaciones tiene el que el territorio de la ciudad sea seccionado para su
utilización y explotación y, en este caso de estudio limitada la libre circulación por
sus vías de acceso y comunicación con la presencia de un fraccionamiento cerrado
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habitantes acentuándola con la diferenciación espacial de que goza? ¿La barda une
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esta diferencia espacial en el plano social y de la convivencia?
son vecinos directos de El Cid, y la citada avenida funciona como una senda que divide en percepción direc-
ta de la vecindad de El Cid, a los habitantes de su costado oriente.
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lonia ha implicado en el imaginario colectivo la separación socio económica de estos dos tipos de asen-
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fracciones de manzana resultante del trazado de las calles y avenidas cuentan con todos los servicios pú-
blicos: agua potable, drenaje, luz. Es por ello que se le asocia con asentamientos de tipo residencial alto.
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cesariamente son resultado del trazado de las calles o avenidas dado que, en algunos casos, las colonias
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tadas y la dotación de servic ios públicos tales como los ya mencionados no siempre están disponibles
desde el inicio del asentamiento, dado su carácter emergente” (Alvarado, 2005: 18).

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