GLOSAS MARGINALES / Saudade económica

AutorEverardo Elizondo

Hace poco, la Comisión Económica para América Latina (Cepal, una dependencia de la ONU) publicó un reporte sobre la situación y perspectivas de la región. El panorama que ofrece para 2016 no es muy halagüeño.

De acuerdo con las estimaciones de la institución, el PIB real de Brasil disminuirá 2 por ciento este año, después de que se contrajo 3.5 por ciento en 2015. Esta opinión, de por sí lóbrega, no es la más negativa disponible. Apenas el 18 de febrero, la OCDE dio a conocer su (disminuido) pronóstico del crecimiento global. En lo que toca a Brasil, este organismo estima que el PIB real cayó 3.8 por ciento en 2015, y proyecta que bajará 4 por ciento el año en curso.

Volviendo a las proyecciones de la Cepal, resulta que la economía de Argentina crecerá un poco menos de uno por ciento -entre otras razones, porque el régimen del flamante presidente Macri ha empezado a corregir los desajustes que le heredó el populismo de los Kirchner-. Chile mantendrá un crecimiento modesto, alrededor de 2.1 por ciento, afectado por la caída de los precios del cobre. Colombia destaca en el conjunto de datos, con una expansión prevista de 3 por ciento, un poco menos que lo observado el año previo.

El caso de Venezuela es aparte. Se trata del "enfermo económico" del Cono Sur. Los números de la Cepal describen un desastre: en 2015, el PIB descendió 7.1 por ciento, y se prevé que baje otro 7 por ciento en 2016. Al mismo tiempo, el País sufre una inflación enorme -quizá la más alta a nivel mundial. El desplome del precio mundial del petróleo es una de las causas de la debacle. Sin embargo, la explicación de veras reside en las malas políticas económicas: el gasto público excesivo, el desorden monetario, los controles de precios, la inseguridad de la propiedad, el irrealismo cambiario, entre otros.

En México, el Inegi acaba de informarnos que el PIB creció 2.5 por ciento en 2015 -la misma cifra que se encuentra en el documento de la Cepal. Por cierto, 2.5 por ciento ha sido, más o menos, el crecimiento promedio anual de la economía mexicana durante mucho tiempo. (Ese número tiene ya visos de ser lo "normal"). Para 2016, el organismo estima un crecimiento de 2.6 por ciento. Hasta recientemente, así lo presumía también el consenso entre los analistas, pero esa perspectiva se revisó a la baja, como reacción a las medidas de ajuste económico anunciadas por las autoridades financieras, hace menos de dos semanas. Ahora, la presunción es que el PIB aumente...

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