Evolución contable

AutorJosé Luis Elizondo Cantú
Páginas31-33

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Cuando surge un acontecimiento del cual se quiere llevar cuenta y razón, por cuestión de inmortalidad, por manifestación de propiedad y/o por tomar decisiones, es cuando nace y aflora al universo como una estrella bella y reluciente, como una necesidad imperiosa, la contabilidad.

Introducción

Con el devenir del tiempo y la vuelta de las hojas diarias de los calendarios, desde que se creó la Tierra hasta la actualidad, las tendencias y usos de la contabilidad han ido variando, con la intención de modernizarse utilizando las herramientas verbales, mecánicas y electrónicas que ofrece el entorno económico. Todo esto con el propósito de evolucionar y adaptarse al cambio.

La primera manifestación de la contabilidad fue: y Dios creó el universo y con ello dio forma y presencia al primer ser humano, Adán, utilizando tierra de aquel lugar, por lo que polvo somos y en polvo nos convertiremos. Y viendo el Señor que no era bueno para el hombre estar solo, de una costilla le creó una compañera y así nació Eva.

En ese momento Eva pronunció: “¡Ya somos dos!”

Con el nacimiento de su primer hijo, Adán mencionó: “¡Ya somos tres!”

Este acontecimiento marcó el nacimiento de la contabilidad, pues bíblicamente se menciona que en los primeros tiempos el patrimonio de un hombre se conformaba por la esposa, las domésticas, los hijos, los terrenos, los cultivos y animales domesticados, de los cuales se llevaba cuenta y razón por sentimiento de propiedad.

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En los primeros tiempos el hombre, en su búsqueda de supervivencia, se dedica a cazar. Es ahí cuando empieza a llevar cuenta y razón del número de animales cazados, de adversarios abatidos con sus propias fuerzas, con la intención de inmortalizarse surgen los famosos signos tallados en los árboles, pinturas rupestres y tabletas de arcilla. El crecimiento de las sociedades propicia el nacimiento del trueque como primer antecedente del comercio, el cual se caracterizaba por el intercambio de mercancías.

Algunos productos, gracias a su demanda y baja oferta, surgen como los primeros sustitutos de las unidades monetarias, como son la sal y el cacao.

Inclusive el trabajo se pagaba con sal, de ahí el surgimiento de la palabra salario.

Con el desarrollo del comercio, la unidad monetaria aparece como forma de remuneración; al principio eran monedas de oro, plata y posteriormente otros materiales metálicos, billetes, cheques, tarjetas de crédito y de débito y hasta nuestros días...

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