La Etica del Estado

AutorMónica Barrera Rivera
Páginas130-133
MÓ N I C A B A R R E R A R I V E R A
130
trato injusto entre sujetos jurídicamente iguales, violentando con ello
el principio de igualdad y el de equidad. El principio de legalidad que
se retoma en los umbrales de la era moderna, establece claramente
que quienes detentan el poder, lo ejerzan con base en reglas estableci-
das que, se supone, han sido consensadas y gozan de la aceptación de
la mayoría.102
El principio de legalidad supone el respeto del ordenamiento en
cualquiera de sus diferentes niveles, y por cualquier tipo de autoridad.
El respeto a la legalidad es para los ciudadanos, dice Bobbio, la garantía
de su derecho de no ser oprimido. El Estado de Derecho es un Gobier-
no de leyes. La aplicación de la justicia es lo mismo que el respeto a la
legalidad.
No se puede poner en duda que la desobediencia habitual o la inob-
servancia general de las normas constituyen, para quien detenta el poder,
una de las razones principales de la pérdida de legitimidad; si quien debe
obedecer el ordenamiento no lo hace, se produce ilegitimidad. La legali-
dad, de la cual deriva el principio con el mismo nombre, es lo que esta-
blece el deber y la propia legitimidad de la autoridad, es decir, el ejercicio
del poder; o sea: el derecho, reconocido, de mandar y ser obedecido.
La Ética del Estado
A medida que la sociedad mexicana avanza culturalmente, se destacan como
insuficientes las reformas realizadas al Estado mexicano. La dimensión ética
y política del Estado, es decir, la forma de relacionarse con la sociedad es,
desde la perspectiva de este libro, el aspecto esencial, y el déficit actual, de la
Reforma del Estado. Sin modificar el tipo de relación, que hasta ahora ha sido
102La doctrina política del constitucionalismo moderno podría sintetizarse así: “todo gobierno está limitado
en sus poderes y existe sólo por el consenso de los gobernados”. Cisneros H., Isidro, Constitucionalismo y división
de poderes, Revista del Senado de la República, vol. 4. núm. 13, México, octubre-diciembre de 1998, p. 11.

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR