Esperanza desesperada

TLAJOMULCO.- Por mucho que los habitantes de la Colonia La Esperanza, en la Delegación de Santa Cruz del Valle, coman frutas y verduras para vivir sanamente, las condiciones en las que se encuentra el lugar donde viven, han terminado por afectar su calidad de vida.

La vialidad principal se llama Gregorio Rodríguez y nunca ha contado con pavimento.

Para solventar ese problema, el Ayuntamiento le coloca grava con tierra. Pero el polvo nunca se termina y las enfermedades no se hacen esperar.

''De los ojos, mis niños apenas se compusieron. ¡No!... Lagañas y lagañas y lagañas. Y me dijo el doctor: 'es que, señora, mientras estén viviendo en esa zona, hay mucha contaminación', la tierra más que nada'', relató Guadalupe Hernández, comerciante de abarrotes de la zona.

Los colonos ya no piden mucho del Ayuntamiento, cualquier ayuda es buena.

''Nos conformamos con que nos empedraran la calle, porque ya tenemos drenaje, ya tenemos luz. Asentaría un poquito la tierra, el empedrado, de perdiz'', opinó Guadalupe.

La mayoría de las viviendas no cuentan con banquetas, las únicas que tienen, es por obra de los mismos vecinos.

La temporada de lluvias, resulta un dolor de cabeza, pues las inundaciones son una constante y los colonos deben de buscar técnicas para resguardar sus pertenencias.

''Si (el agua) se mete, a los muebles les pones un ladrillo'', señaló...

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