'Diga dónde están los desaparecidos'
| Autor | Rolando Herrera |
El primer grito de protesta salió de entre familiares de los desaparecidos cuando el titular de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, enfatizó que las Fuerzas Armadas siempre han actuado bajo las órdenes de las autoridades civiles.
Ante un público conformado por hijos, nietos o víctimas directas de la llamada Guerra Sucia, y por militares y funcionarios, el General Secretario hacía malabares para evitar reconocer la responsabilidad del Ejército en los crímenes cometidos entre 1965 y 1990.
"Para realizar estas tareas fundamentales en beneficio de la seguridad y desarrollo nacionales, las Fuerzas Armadas han permanecido subordinadas al poder civil", indicó.
Apenas había terminado la lectura del párrafo, cuando una voz masculina gritó: "Diga dónde están los desaparecidos".
Sin inmutarse, el mando militar refirió que la Constitución establece que el Presidente de la República es el comandante supremo de las Fuerzas Armadas.
"Secretario, ¿dónde están los culpables? Los desaparecidos, ¿dónde quedaron?", le volvieron a cuestionar.
La ceremonia por el acuerdo entre la Sedena y la Comisión para el Acceso a la Verdad, el Esclarecimiento Histórico y el Impulso a la Justicia de los Hechos Ocurridos entre 1965 y 1990, se realizó en el Campo Militar número 1, donde activistas estuvieron recluidos en los años 60 y 70, y donde algunos de ellos habrían desaparecido.
El acto pretendía dar inicio al desagravio que por décadas han pedido familiares de las víctimas, garantizando que con el acceso a las instalaciones militares y a los archivos se podrá conocer la verdad de lo ocurrido aquellos años.
Sin embargo, Sandoval dijo que en las acciones llevadas a cabo entonces, el Estado mexicano pretendió garantizar la paz, y lamentaó que haya habido víctimas de actos ilegales.
También, dijo, el Ejército tuvo sus propias bajas y que es justo que se les recordara, inscribiendo su nombre en el mural de los caídos.
"Con orgullo les expreso que el propio Mandatario (Andrés Manuel López Obrador) autorizó inscribir los nombres de militares fallecidos con motivo de los hechos del pasado en el Monumento a los Caídos de las Fuerzas Armadas, que se ubica en la Plaza del Servicio a la Patria, como un tributo y un sentido homenaje a los soldados que cumplieron con su deber aún a costa de su vida", señaló.
Esto motivó que los familiares corearan la consigna: "Porque vivos se los llevaron, vivos los queremos".
Al finalizar de la ceremonia, los familiares reprocharon que el...
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