De la descolonizacion a la Gestion Integrada de Recursos Hidricos (GIRH): La politica del agua de Belice a traves del tiempo (1981-2015)/From Decolonization to Integrated Water Resources Management (IWRM): Water Policy in Belize though Time (1981-2015).

AutorKauffer, Edith

El Estado nacional conocido hoy en día como Belice posee sitios arqueológicos que indican que fue poblado en el siglo x por los mayas, entre los años 2000 y 1000 antes de Cristo (Toussaint, 1993: 18), cuyos descendientes aún encontramos principalmente en el sur del país. La colonización europea se inició en 1638 por piratas que solían refugiarse en estas tierras inhóspitas y que se dedicaron a la explotación del palo de tinte (Toussaint, 2009: 108) cuando su actividad marítima desapareció, hasta que en 1862, la entonces llamada Honduras Británica, fue declarada formalmente colonia de Gran Bretaña bajo el mando de un gobernador con poderes absolutos (Hoffmann, 2014: 13). Después de cambios progresivos en la legislación, entre los cuales figuran la instauración del sufragio universal en 1954 y del sistema ministerial en el siguiente año, el nombre del país fue cambiado el primero de junio de 1973 de Honduras Británica a Belice. Menos de una década más tarde, el 21 de septiembre de 1981 Belice alcanzó su independencia al término de un periodo de autogobierno que comenzó en 1964 y que correspondió también a la lucha más aguda por la independencia (Toussaint, 2009: 107). A partir de esta fecha, el país ha tenido un incremento poblacional considerable: la población que en 2000 era de 248 916 habitantes, alcanzó 322 453 habitantes en 2010 y se estima un total de 368 310 beliceños en 2015 (Statistical Institute of Belize, 2015). (1) En cuanto al índice de desarrollo humano (IDH) de Belice, se incrementó de 0.675 en el año 2000 a 0.732 en 2013, lo que lo ubica en el lugar número 84 de 187 países evaluados (UNDP, 2015). A pesar de tener una economía pequeña, Belice presenta mejores indicadores económicos que los demás países del llamado triángulo norte (Guatemala, El Salvador y Honduras) de Centroamérica con un producto interno bruto (PIB) más elevado.

Cabe subrayar que la integración política de Belice a Centroamérica sigue siendo un reto ya que el diferendo territorial con Guatemala--país que reivindicó durante muchas décadas su soberanía sobre Belice--se encuentra a la fecha sin solución y ha excluido históricamente a Belice de formar parte de Centroamérica (Toussaint, 2009: 127) desde el punto de visto político, privilegiando así relaciones con los Estados del Caribe con los cuales existe incluso una cercanía cultural y lazos históricos en referencia al pasado colonial británico compartido. (2)

Geográficamente, Belice se encuentra ubicado en la costa noreste de Centro-américa, limita al norte con México, al oeste y sur con Guatemala y al este con el Mar Caribe, con un área terrestre total de 22 970 [km.sup.2], incluyendo 690 [km.sup.2] fragmentados en más de 1 060 islas, conocidas como cayos. Su relieve es plano y bajo en las zonas costeras y en algunas regiones del norte, mientras que en el sur las montañas alcanzan hasta 1 124 msnm. De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional (NMS, por sus siglas en inglés) (NMS, 2015), la temperatura media oscila entre 27 C en las costas y 21 C en las áreas de mayor altura, registrando variaciones a lo largo del año; enero es el mes más frío y mayo el más cálido.

El estudio sobre la situación de los recursos hídricos en Centroamérica ha identificado en Belice 39 cuencas hidrográficas, de las cuales 16 son las principales, y las otras 23 se consideran como subcuencas. Tomando en cuenta su relieve, el país se divide en cuatro regiones hidrográficas: la Región 7 en el Norte, la Región 9 en el oeste y el corredor central o Región 11, que comprende la planicie costera y la ladera costera, y la Región 13, en el extremo sur (GWP, 2011). Para 2005, los usos principales del agua estaban destinados en 43.7 por ciento a la agricultura, 36.5 por ciento a la industria, (3) y 19.7 por ciento al abastecimiento humano (BEST, 2009).

En el área rural de Belice, 95 por ciento del agua dulce proviene de depósitos subterráneos y la extracción se realiza por medios rudimentarios, como bombas manuales. El volumen de agua dulce renovable en 2008 fue de 53 156 [m.sup.3] per cápita, una de las disponibilidades más altas en toda América Latina (GWP, 2011). En general, el país cuenta con numerosas fuentes superficiales de agua dulce, como ríos, lagos y lagunas esparcidos a lo largo de su territorio. El clima ha dado pie a múltiples eventos de ciclones tropicales, huracanes y tormentas frecuentes, que históricamente han dejado estragos en la población beliceña: de 2000 a 2008, de acuerdo con el Global Water Partnership (GWP), el costo de los daños registrados por ciclones tropicales ha representado un total de 526 206 905 dólares estadounidenses (GWP, 2011). Todavía el paisaje registra en 2014 los efectos de los huracanes de las décadas pasadas, en particular a lo largo del recorrido por la carretera que lleva de Belmopán--capital inaugurada en 1970 en respuesta al huracán Hattie de 1961 que golpeó a la Ciudad de Belice, la antigua capital--a Dangriga, poblada por afrodescendientes del grupo garifuna: en particular las viviendas de esta región presentan las huellas y los golpes de los sucesivos eventos hidrometeorológicos.

Por estar ubicado en la costa caribeña de América Central y en un área con un clima subtropical, Belice no solamente es un país con abundancia de agua sino que es el país que posee la mayor disponibilidad de agua per cápita de todo el istmo centroamericano, con una precipitación promedio anual que varía de 1 524 mm en el norte a 4 064 mm en el sur (GWP, 2011: 129), con variaciones a lo largo del territorio. Sin embargo, desde principios del siglo XXI ha aumentado la demanda del recurso para fines agrícolas, industriales y turísticos, a la par del crecimiento poblacional que repercute en la demanda de agua para uso doméstico y de la contaminación que disminuye la calidad en el recurso disponible (Boles et al., 2008).

Podemos considerar que Belice está inmerso en una paradoja en cuanto al tema del agua, ya que a la abundancia de recursos hídricos le corresponde una débil institucionalidad en la gestión de los mismos, en un contexto de cambios que vuelve imprescindible la existencia de instituciones de gestión eficientes y eficaces. Belice ha transitado desde su independencia en 1981 por diversas fases de gestión del agua y pretende hoy en día adoptar la Gestión Integrada de Recursos Hídricos (GIRH) como fundamento de la política hídrica nacional y por ende, de las instituciones que la sustentan e implementan.

Este artículo se fundamenta en los resultados de diversos proyectos de investigación que se han realizado en países centroamericanos desde el año 2003, a través del trabajo de campo mediante entrevistas con actores gubernamentales, organizaciones de la sociedad civil (OSC), académicos y agencias internacionales, así como la realización de eventos sobre agua, la revisión de documentos de política pública, de diagnósticos y del marco legal actual y pasado beliceño. En particular, se llevaron a cabo recorridos en la cuenca transfronteriza del río Hondo y algunas entrevistas en Belice en marzo de 2014. En noviembre de 2014 se trabajó en la capital de aquel país, Belmopán, para identificar distintos actores sociales y dependencias relacionados con el agua; se realizó un taller con organizaciones de la sociedad civil, universidades y la cooperación internacional y se hicieron once entrevistas semiestructuradas que aportaron la información empírica de nuestro análisis de la política hídrica.

En este contexto, proponemos hacer un análisis de las instituciones relacionadas con la gestión del agua en Belice en la actualidad, tomando en cuenta que éstas deberían reflejar el planteamiento de la GIRH, el cual se asume como el eje de la política hídrica contemporánea. Partimos de una premisa que considera que las debilidades e inadecuaciones institucionales que observamos durante la investigación de campo en Belice se reflejan en el contenido de las leyes, en su aplicación y en las estructuras de gestión existentes o, entendidas como instituciones de la política hídrica y de la gestión del agua en este país. Adoptar el institucionalismo histórico para entender la situación beliceña en materia de instituciones hídricas permite ubicar el análisis en un contexto institucional vinculado con las realidades políticas y económicas actuales de Belice, las cuales se caracterizan por una serie de elementos resultantes de la historia de este Estado recién independizado de Gran Bretaña--es decir con instituciones en proceso de construcción y fortalecimiento--y por las interacciones políticas internas así como con el exterior.

El artículo aborda en primer lugar el institucionalismo histórico, su pertinencia para Belice y para el análisis de la GIRH. En segundo lugar analiza la transformación de la política del agua en Belice, inicialmente organizada desde una perspectiva sectorial hacia la GIRH y evidencia cómo el punto culminante de la aprobación de una ley enfocada en este propósito inauguró la profundización de la debilidad institucional relacionada con las herencias de este Estado joven.

LAS INSTITUCIONES EN BELICE: DE LO TEÓRICO A LA GIRH

Este apartado pretende abordar en primer lugar el concepto de instituciones utilizado en este trabajo a partir de los planteamientos del neoinstitucionalismo y la pertinencia de analizar la gestión del agua en Belice desde este punto de vista. Intenta explicar la relevancia de un análisis centrado en las instituciones de gestión del agua dentro del paradigma actual de la GIRH cuando ésta es adoptada por un determinado Estado nacional y por lo tanto la importancia de aprehenderlo desde un punto de vista teórico que combine la teoría del neoinstitucionalismo y las instituciones planteadas como un componente central de la GIRH.

Instituciones e institucionalismo histórico

La mayoría de los autores consideran que hoy en día tres corrientes integran el neoinstitucionalismo (Hall y Taylor, 1997; Hay y Wincott, 1998; Lecours, 2002; Massardier, 2004), aunque...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR