¿Se debe pagar ISR por la educación en todos los niveles en México?
| Autor | Dr. Carlos Enrique Pacheco Coello |
| Cargo | Docente, Consultor e Investigador |
| Páginas | 54-56 |
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Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), usan-
do la fórmula de Laspeyres se muestra que para cubrir la canasta
básica en México se requiere lo siguiente: alimentos, bebidas, taba-
co, ropa, calzado y sus accesorios, vivienda, muebles, aparatos y
enseres domésticos, salud, cuidados personales, esparcimiento, trans-
porte, y educación.
Si analizamos los 13 productos que integran la canasta básica en Méxi-
co, estoy seguro de que 99% de las personas que carecen de empleo
o tienen un empleo en el cual les pagan un salario mínimo que no les
alcanza para cubrir estos productos, no los pueden comprar, aunque los
necesiten. Por eso en un hogar deben trabajar el esposo y la esposa, ya
que su gasto aumenta más al pagar a trabajadores que hagan la limpieza
o que cuiden a sus hijos. Lo anterior demuestra que en los hogares se
deben atener a procrear dos hijos, lo cual incide en la disminución del
bono demográco y en que haya población más adulta con limitaciones
físicas; esto también aumenta el gasto por más medicamentos, asilos de
ancianos y artículos geriátricos.
¿Cómo surgió el problema del bono demográco? En la época de los baby
boomers en los hogares las parejas tenían un promedio de 10 hijos y las
escuelas debían abrir en la tarde y en la mañana, por lo que era necesario
construir muchos centros escolares y eso propiciaba una gran eroga-
ción de los presupuestos gubernamentales, además del gran gasto de
las arcas para otras obras, muchas veces sin sustento. En este sentido
se procedió a controlar la natalidad a n de que las parejas solo tuvieran
dos hijos, sin embargo, no se imaginaron lo que iba a suceder en el futuro.
Ahora el problema consiste en que las jubilaciones ya son muchas, pues
se tiene una población más adulta, a la cual se le debe pagar su pensión,
aunque ya se están agotando las fuentes de nanciamiento para pagar
dichas jubilaciones y esto también hace un enorme daño a las nanzas
públicas.
A la pregunta de un servidor de si se debe pagar el Impuesto Sobre la
Renta (ISR), la respuesta es con varios enfoques. Comienzo con los trece
productos, estimo que no se debería incluir en la canasta el tabaco y las
bebidas, si son refrescos embotellados, sugiero que los debemos elimi-
nar; los refrescos naturales sí deben estar. Ahora bien, si reexionamos
en cuanto al ISR si estas son comercializadas en tiendas departamen-
tales o en fábricas que los producen deben pagar el ISR a una tasa más
alta de la escala de la tabla para calcular este impuesto. En el caso de las
pequeñas y medianas empresas o los tendejones, deben pagar menos
en función de que sus ventas son menores y, por ende, pagan menos ISR.
Pero analicemos el rubro de salud y educación, ambos son elementales.
Los alimentos, si son para estar sanos y son resultado de las cosechas
de los campesinos siempre y cuando no trabajen para surtir a grandes
empresas y sean solo ejidatarios, en mi opinión se les debe exentar para
dicho pago en todos los casos que sean formales y no permitir que las
cooperativas las comercialicen y las vendan como ocurre con los pesca-
dores, que en alta mar les venden a piratas para tener dinero y comer, y
estos bandidos los vendan más caros.
En cuanto a la salud, si un médico no le cobra por consulta a la gente pobre,
que es la mayoría, se les debe exentar. En la educación a los profesores
también se les debe exentar si estos solo se dedican a enseñar, pero si
tienen un despacho o clínica particular por estos servicios deben pagar
el ISR. ¿En qué me baso para esta aseveración? Simple: la educación y la
salud son básicos para que un pueblo esté bien educado y capacitado,
para que no tengan que ir en busca del sueño americano en EE.UU., donde
los discriminan y trabajan en lo más rudo y evitar que digan que los mexi-
canos solo sirven como peones.
Hagamos otra reexión: si los mexicanos trabajan bien, podrán ganar
mejor y, por lo tanto, comprar más, y así en las tiendas donde adquie-
ren lo que necesitan pueden pagar más ISR. Así salen ganando los que
gestionan los recursos que el pueblo les da al contribuir para tener más
infraestructura y mejores servicios siempre y cuando no sean para pagar
elevados sueldos a los funcionarios y a los legisladores que viven del
dinero de las contribuciones de los ciudadanos.
La educación en un sentido amplio es aprender a diario, ya que nunca se
acaba de aprender. Cuando hablo de educación, no es para decir que una
persona que no sabe leer y escribir no es educada. Si en verdad quere-
mos un pueblo libre se debe apoyar a las personas para que acudan a las
escuelas y aprendan para que de esta manera no tengan que extender la
mano a los gobernantes que el pueblo eligió. Por lo tanto, a los docentes
y a los médicos que no cobran se les debe exentar del ISR y así tener un
efecto multiplicador en la generación de riqueza para los que aportan e
inviertan en la generación de empleos y no para jugar en dinero como las
criptomonedas o en inversiones preparadas para evitar el pago de sus
contribuciones y luego se los llevan a los paraísos scales.
En conclusión, la exención del ISR a los rubros antes mencionados no
es una prestación, sino una aportación para que nuestro país pueda
crecer y trascender, y no estar a merced de las remesas que son una
vergüenza para México y los países pobres. Repito, la historia no se
repite, pero rima.
Dr. Carlos Enrique Pacheco Coello
Docente, Consultor e Investigador
pcoello@correo.uady.mx
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