Coqueto envase

AutorStaff

Frascos de diferentes tamaños y estilos son la vistosa opción, para servir bebidas y alimentos, que con más frecuencia puede verse en varios lugares. Aquí sólo una muestra de algunos ejemplos que llevan este toque fresco y original.

El "canning"

Entre las tendencias de hacerlo uno mismo, de volver a lo básico y del reciclaje que se han desa-rrollado en los últimos años, también el canning ha tomado fuerza.

Se trata de una antigua práctica para la conservación de alimentos en frascos; pero más allá de las típicas conservas, actualmente, esta idea ha cobrado un nuevo impulso.

Y no es la intención de alargar la vida de los productos exclusivamente la que se experimenta en la actualidad, sino la de servir, de manera original, bebidas y alimentos en bares y restaurantes.

Saborear aguas frescas, disfrutar un coctel o sorber un frappé en un frasco de vidrio es una experiencia a la que se suman cada vez más restaurantes y bares de la Ciudad.

De los primeros

Además del ambiente relajado y elegante que mezcla lo contemporáneo con lo vintage, a esa suave atmósfera chic de Shabby Shabby se le agrega el sabor de su cocina francesa con toques mexicanos, así como el plus de ser pioneros en usar frascos.

Desde hace tres años se les ocurrió que -como sucede en la casa de cualquier abuelita que recibe muchas visitas y se queda sin vasos- se tienen frascos de diferentes tamaños (400 y 700 ml.) para servir su variedad de bebidas.

Los compran por caja para servir limonada con yerbabuena, y fresa con yerbabuena; también el tinto y el blanco de verano, el clásico clericot y frapuchino o frappé de fresa o de distintos sabores (entre $35 y $40). Se cuida la presentación con algún adorno o fruta de temporada.

SHABBY SHABBY: Av. Guadalupe 1267, casi Glorieta Chapalita / 3121-5304 / Ma a Do, 8:30 a 0:00

Para llevar a casa

Desde que iniciaron, en Saint Michel pensaron en botes prácticos para llevar postres ricos a casa, se trata de "jar cake", pasteles en frasco para consumo individual, que van desde un cheese cake o un tiramisú, aunque también hay especiales como el panna cotta, el pay de manzana, selva negra, entre otros, en una jarra (a $55 cada una, son botes de 600 ml).

Son envases especiales comprados para contener estos ricos postres; una característica es que los venden con cuchara, así que el cliente le da unas cucharadas, lo tapa y se lo lleva casa. Y los clientes lo buscan mucho porque la jarra no tiene desperdicio, no es algo que se bote a la basura, pues se puede reusar y guardar en ella lo que...

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