Cindy Blanco / La economía del cuidado

AutorCindy Blanco

No hace mucho tiempo que el "share economy" se volvió parte de nuestras vidas.

Aunque pareciera que fue hace años que llegó para quedarse, esta nueva economía trajo soluciones como Uber en el transporte, Airbnb en el turismo y WeWork en los espacios de oficina.

Esta tendencia está basada en la premisa del "consumo colaborativo", la cual ha dado pie a un cambio de paradigma, donde priorizamos el "acceso a" sobre el ser el "propietario de".

Una nueva tendencia igual de disruptiva y "pegajosa" se avecina, y esta vez viene impulsada por la coyuntura de la pandemia de Covid-19.

Esta nueva tendencia es la "economía del cuidado", conocida como el "care economy". Esta tendencia básicamente consiste en el dinero que invertimos en el cuidado de las personas, desde el momento de su nacimiento hasta el final de sus vidas. Es un mercado en expansión, evolucionando en la medida que reconocemos y cuantificamos el costo y las demandas relacionadas con brindar cuidado a otros.

Desde una perspectiva de negocios, el "care economy" está dando pie a soluciones disruptivas, apalancando la tecnología para resolver retos en torno a la planeación familiar, la salida temporal y reinserción laboral por la maternidad, educación, productos y servicios para padres de recién nacidos, niños y adolescentes, la administración de las actividades familiares, el cuidado de hijos o familiares enfermos, los cuidados paliativos en la vejez, etcétera.

De acuerdo con el fondo de inversión Pivotal Ventures y The Holding Co., se estima que el "care economy" es un mercado que tiene un valor de aproximadamente 648 mil millones de dólares.

El "care economy" está captando la mayor atención por parte de las empresas, especialmente de los grandes corporativos, lo cual se agudizó a raíz de la pandemia.

Desde mi punto de vista, la razón principal por la que el crecimiento del "care economy" está estrechamente ligado a la pandemia y por la que está sucediendo principalmente dentro del espacio laboral de las grandes empresas, se debe a cuatro razones principales:

La adopción exponencial de la tecnología como consecuencia de la...

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