La ciencia fue su vida

AutorNatalia Vitela y Lourdes Zambrano

Natalia Vitela

René Drucker fue un apasionado de la divulgación científica, y nadie podría negarlo. De hecho, Enrique Graue, Rector de la UNAM, califica a quien fuera titular en funciones de la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación (Seciti) de la Ciudad de México como el mejor divulgador que ha tenido el País.

"Supo difundir y darle valor a la ciencia. Ha sido el mejor difusor y, probablemente, será el mejor difusor de la ciencia que tendrá este País", aseguró.

Drucker, fallecido el domingo a los 80 años, hizo del conocimiento científico un bien común.

A decir de Eduardo Vázquez Martín, Secretario de Cultura de la Ciudad, sacó a la ciencia de los claustros para que estuviera al alcance de la ciudadanía y participó en la construcción de instituciones, como la propia Seciti, de la que fue fundador. "Era un científico en la ciudad, en la sociedad, en la política... Tenía esa pasión de compartir el conocimiento y de que éste no fuera una forma

de privilegio", mencionó.

Su laboratorio era un hervidero de alumnos que daba gusto, afirmó Juan Ramón de la Fuente, ex Rector de la Máxima Casa de Estudios.

"Buscaban a Drucker para hacer sus tesis con él, de maestría, de doctorado. Siempre tenía proyectos audaces y con un enorme entusiasmo impulsaba a los jóvenes. Por eso es probablemente de los científicos que más jóvenes ha graduado en los últimos 30 o 40 años". Dirigió 60 tesis.

De la Fuente destacó su papel como Director General de Divulgación de la Ciencia de la UNAM. "Me acompañó

durante los ocho años que estuve al frente de la Universidad, y realmente hizo una gestión muy buena; fortalecimos la calidad de la investigación; impulsó nuevos proyectos, siempre defendiendo los intereses de los investigadores y los estudiantes", aseguró.

Indicó que en los momentos duros que se enfrentaron para que la UNAM recuperará su vida académica, ante la huelga del 99, Drucker estuvo siempre presente. "Siempre dando la cara, siempre solidario", agregó.

Entre las principales aportaciones del científico especializado en Fisiología y Neurobiología fue lograr trasplantar células suprarrenales en el cerebro para controlar el Mal de Parkinson. Y, además, fue un gran estudioso del sueño, materia en la cual sus investigaciones marcaron un antes y un después.

La ciencia fue su vida. "Estaba dedicado a desarrollar ciencia básica de alto nivel y, a su vez, se preocupaba porque esta ciencia se transfiriera en la resolución de problemas", afirmó Sergio Alcocer...

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