Aun sin kilos tiene riesgos

AutorNatalia Vitela

Estar delgado no es sinónimo de ser sano. Hay personas que no tienen kilos de más, y, sin embargo, por su sangre circulan niveles altos de grasas, como triglicéridos y colesterol, lo que las pone en riesgo de sufrir arteroesclerosis, enfermedad que puede desencadenar un infarto al miocardio o una embolia cerebral.

Esta falsa creencia se ha dado porque se asocian sobrepeso y obesidad con las alteraciones de estas grasas, pero, aunque la mayoría de quienes tienen descontrol sufren estas condiciones, las personas delgadas no están exentas de padecer la alteración, coinciden especialistas en medicina interna.

Los niveles altos de triglicéridos y colesterol en personas sin sobrepeso y obesidad se deben principalmente a que tienen una alimentación inadecuada y son sedentarias, como sucede en los casos de personas con esas enfermedades, explica Fernando Laredo, médico internista del Hospital de Especialidades del Centro Médico Nacional Siglo XXI.

"Los médicos nos hemos concentrado en decirle a las personas con sobrepeso y obesidad que tienen que bajar de peso, pero el mensaje debe ser que todos necesitan tener una dieta adecuada y hacer ejercicio.

"En los últimos 40 años hemos duplicado la cantidad de alimentos que estamos ingiriendo. Además, hay un aumento en el consumo de grasas, especialmente de origen animal, y de azúcares", advierte.

GENÉTICA

El internista Jorge Aldrete, secretario general del Colegio de Medicina Interna de México, explica que hay personas delgadas que también pueden tener alteración de las grasas debido a factores genéticos.

"El 20 por ciento del colesterol que uno tiene en sangre depende de la dieta, mientras que el 80 por ciento lo produce el hígado. Puede haber personas con colesterol elevado porque su hígado produce colesterol en mayor cantidad", ejemplifica.

El experto indica que por ello la recomendación es que, a partir de los 20 años, las personas se realicen una revisión médica que mida los niveles de triglicéridos y colesterol en sangre, pues la elevación de estas grasas "no duele ni se ve a simple vista".

"Si salen bien del estudio, pueden hacerse un chequeo cinco años después. Si, en cambio, tienen alteraciones, la recomendación

es que cambien su estilo de vida. Si después de seis meses no han respondido, se debe evaluar la posibilidad de que se sometan a tratamiento farmacológico", señala.

Laredo menciona que también se aconseja que las personas se observen en el espejo, y si están delgadas pero tienen un...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR