Anécdotas sobrenaturales

Yo laboraba de vigilante en una empresa maquiladora de San Nicolás de Los Garza, Nuevo León.

Un noche, ya cerca de las tres de la mañana me tocó hacer un rondín por el área de mantenimiento eléctrico en una nave industrial que estaba hacia el final de la empresa.

Siempre nos acompañaban dos perros pastor alemán en la vueltas de revisión, pero curiosamente esa madrugada, los animales se negaron a ir conmigo.

Así que tomé mi bicicleta y ahí voy pedaleando; de repente, algo al interior de la nave industrial llamó poderosamente mi atención.

Era un enorme toro negro que parecía estar pastando en el interior del lugar, pero eso era totalmente ilógico, pues todo estaba pavimentado y no crecían yerbas ahí.

Además... ¿cómo era posible que se metiera ese animal ahí si las bardas del perímetro eran de concreto armado y medían más de dos metros y medio de altura?

El portón estaba cerrado con candado y no había manera de que se colara durante el día y más difícil aún, que pasara desapercibido por todos los compañeros de vigilancia.

Pues muy intrigado me iba acercando al sitio y cuando llegué, cual sería mi sorpresa que aquél astado había desaparecido por completo.

Revisé una y otra vez, pero nada, se esfumó en medio de la noche.

Recuerdo que cuando entré a trabajar a esta empresa, un encargado del departamento de Mantenimiento Mecánico, me dijo que por las noches tuviera cuidado al pasar por ahí, porque asustaban.

Pero yo hice caso omiso porque pues las rondas se tienen que hacer y son ordenadas por los jefes y no hay de otra.

Esa noche que les cuento, llevaba un perro conmigo, toda esa zona estaba en completa oscuridad, solamente la luz de mi lámpara de mano iluminaba el espacio.

De repente, cuando pasé montado en mi bicicleta, sentí claramente que alguien me dio una nalgada hacia el lado derecho de la cadera.

No muy fuerte, pero suficiente para sentir el golpe.

Me sorprendí y alumbré a todos lados, pero sólo para advertir que ahí no había nadie.

Desconcertado me subí de nuevo a la bicicleta y empecé a alejarme de...

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