Aguarda a Gore papel de pacificador
| Autor | Alberto Armendáriz |
Corresponsal
NUEVA YORK.- En medio de la reñida lucha voto a voto por la nominación presidencial demócrata entre Hillary Clinton y Barack Obama, la atención se está fijando cada vez más en los movimientos del ex Vicepresidente y ex candidato presidencial Al Gore, quien podría ayudar a poner fin a la contienda. Después de todo, ya tiene en su haber un premio Nobel de la Paz.
Desde que perdió la Casa Blanca ante el republicano George W. Bush en las controvertidas elecciones del año 2000, Gore, de 60 años, se ha convertido en una de las figuras más respetadas no sólo del Partido Demócrata sino de todo el ambiente político en Estados Unidos.
Su incansable actividad por hacer consciente al mundo del calentamiento global le ha ganado un lugar preferencial en la historia de este país y seguidores en todo el planeta, además del Nobel, y un premio Oscar, un Grammy y un Emmy por su popular documental "Una verdad incómoda".
Para muchos es uno de los "hombres sabios" del partido que deberían poder orden y evitar que se llegue al final de la temporada de primarias -el 3 de junio- sin una nominación definida, y a una dividida Convención Nacional Demócrata, a finales de agosto en Denver, en la que los superdelegados serán finalmente quienes elijan al candidato oficial.
Gore es uno de estos 796 superdelegados que pueden elegir a su favorito sin considerar el voto popular.
No han faltado tampoco quienes incluso han defendido la alternativa de que si la pelea entre Clinton y Obama no se resuelve para la Convención, se decida elegir entonces a un tercer candidato de compromiso, y el mejor posicionado sería Gore.
Como Obama, desde el principio hizo pública su oposición a la guerra en Iraq, y, al final, tiene mucha más experiencia en el gobierno que la ex Primera Dama; fue miembro de la Cámara de Representantes (1977-1985), del Senado (1985-1993), y Vicepresidente.
Gore ha decidido mantenerse neutral y esta semana en una entrevista en la Nacional Public Radio rechazó con carcajadas la posibilidad de que él termine siendo el candidato presidencial de nuevo.
"En un año de remotas contingencias, eso es lo más remoto que uno se podría imaginar", dijo.
Y sobre su neutralidad aclaró: "Simplemente estoy viendo y escuchando la campaña. Como delegado en la Convención, emitiré mi voto en el debido momento. Todavía no he descartado hacer público mi apoyo a uno...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba