Adrenalina a bordo de balsas

AutorCarmen González

La oportunidad de desafiar la furia de un río embravecido llegó.

Durante los últimos meses, las fuertes lluvias registradas en diversas regiones del País han provocado la creciente de los ríos, lo cual ha derivado en trágicas situaciones de emergencia para algunos pobladores.

Sin embargo, esta condición climática también permite que se realicen deportes de aventura como el rafting, en el que la fuerza de la naturaleza se aprovecha para que los amantes de la adrenalina aborden balsas neumáticas y remen río abajo sorteando olas, crestas y remolinos.

Quienes deseen vivir esta aventura pueden viajar al río Amacuzac, en Morelos, a 40 minutos de Cuernavaca. Cabe señalar, que en este afluente, la temporada de rafting terminará a principios de diciembre.

El Amacuzac se divide en dos secciones. La parte alta tiene rápidos, es decir, caídas de agua de niveles 2 y 3 (en una escala del 1 al 5). Esto significa que sus bajadas y crestas son moderadas y aptas para novatos y niños de 7 años en adelante.

La parte del bajo Amacuzac es de corriente más fuerte, pues al afluente del Amacuzac se suma el del río Yautepec, lo que provoca remolinos y descensos más dramáticos, clasificados como de nivel 4.

Desde fines de octubre, la emoción empezó en la Huasteca Potosina, específicamente en el río Micos, de...

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