Acción legal desde París

AutorAnne Marie Mergier

París.- Desde hace dos años Frank Berton, abogado francés de Florence Cassez, amenaza con demandar ante la justicia de su país a Genaro García Luna y a Luis Cárdenas Palomino; pero hasta la fecha se ha abstenido de hacerlo.

El pasado 14 de enero, después de la reunión del presidente Sarkozy con los padres de la acusada y en la que él también participó, Berton declaró en el mismo patio del Palacio del Elíseo que ya tenía todo listo para emprender una acción judicial contra el secretario de Seguridad Pública y el jefe de la Agencia Federal de Investigación de México.

En entrevista con la corresponsal el miércoles 16, el abogado ofrece más detalles y revela entretelones insólitos del enredo político, diplomático y judicial en el que se enfrascaron los dos gobiernos.

–Ya lleva casi dos años hablando de estas demandas… ¿Ahora va en serio?

–Tenía razones de sobra para hacerlo, pero no quise que estas demandas fueran interpretadas como presión o injerencia en la instrucción del caso de mi clienta. Me abstuve por respeto hacia la soberanía de la justicia mexicana. Pero ahora la situación es distinta.

–¿Es decir…?

–El Séptimo Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito (en México) acaba de rechazar el amparo de mi clienta. Ya no le queda recurso judicial alguno; su condena es definitiva. Desde el pasado 10 de febrero tengo las manos libres para demandar a estos dos personajes por falsificación de documentos judiciales y uso de estos documentos falsificados, ante el procurador de Justicia de Paris, Jean Claude Marin. El artículo 441- 4 del Código Penal francés considera la falsificación de documentos judiciales como un crimen, lo castiga con 10 años de prisión y una multa de 150 mil euros. Se aplican las mismas penas para el uso de estos documentos falsificados.

Dicho código autoriza a los ciudadanos franceses a demandar a un extranjero por un crimen cometido en su contra en cualquier parte del mundo. Esa demanda debe ser presentada en el Palacio de Justicia de París, ante el procurador general. En caso de que Jean Claude Marin dictamine que la queja es justificada, confiará el expediente a un juez de instrucción que convocará a García Luna y a Cárdenas Palomino para interrogarlos sobre los delitos mencionados en la demanda interpuesta por Berton.

Ya en esta situación, si los acusados no se presentan en el Palacio de Justicia de París, el juez lanzará una orden internacional de detención en su contra mediante la Interpol. Una medida como esa por lo menos impediría que García Luna y Cárdenas Palomino salieran de México.

En tanto, el procurador general, Jean Claude Marin, conoce de sobra el expediente de Florence Cassez porque viajó varias veces a México para tratar el asunto. Su primera estadía en el Distrito Federal fue a principios de 2009 , en vísperas de la visita oficial de Nicolas Sarkozy. Hasta donde se puede saber, Marin entendió que se podía solucionar el problema y envió un mensaje en ese sentido al presidente francés. Pero Florence fue condenada a 60 años de cárcel.

Marin volvió dos veces a México para participar en la Comisión Bilateral encargada de reflexionar sobre una posible aplicación del Convenio de Estrasburgo en este caso. Sus esfuerzos para convencer a sus homólogos mexicanos de autorizar el traslado de Cassez a una cárcel francesa fueron vanos.

–¿A qué se refiere concretamente cuando habla de falsificación de documentos judiciales y uso de estos documentos falsificados?

–Me refiero a la falsificación flagrante del acta de detención de Florence Cassez y al uso de ese documento falsificado como base para lanzar un proceso judicial en su...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR